Berdejo

A orillas del recién nacido río Manubles, encajonado en un paisaje fronterizo y hermoso, Berdejo se encastilla en un cerro a los pies de su castillo.

datos prácticos

 

Ayuntamiento: Paseo del Manubles, 1

Tel: 976 847 187

Email: berdejo@dpz.es

Web: www.berdejo.es 

Gentilicio: berdejano/a

Fiestas: Virgen del Río y San Millán (8 y 9 de septiembre)

Distancia a la capital

Altitud

Berdejo

La primera fuente escrita en la que se menciona Berdejo data del año 650; fue San Braulio el que lo citó en la biografía que realizó sobre San Millán. El santo obispo zaragozano afirmaba que las reliquias del santo eremita se guardaban en su tierra natal “non procul (no lejos) a Villa Vergegio” es decir, en Torrelapaja, donde aún se conservan. Y es que hasta el siglo XVI había un dicho, “Torrelapaja y Berdejo (Verdejo) dos lugares y un solo concejo”. Pero en 1601 esta unión administrativa se truncó, quedando solo entre ambos concejos la gestión de la llamada Casa de San Millán (un hospital de peregrinos con una historia más que interesante) y la de las reliquias del Santo, que se guardan en una urna en la iglesia de Torrelapaja. La citada urna tiene cuatro llaves, dos las tenían el alcalde y el cura de Torrelapaja y otras dos los respectivos de Berdejo.

Las fuentes escritas enmudecen a partir de ese momento hasta el año 1131, en la que Berdejo aparece como término en el fuero de Calatayud. Durante los siglos XIII y XIV fue lugar de continuas escaramuzas entre castellanos y aragoneses su posición le valió ser conquistado a menudo por las armas castellanas, siendo fortificado por Pedro IV en 1357. Berdejo es tierra fronteriza con Castilla y por su situación estratégica, en la cabecera del valle del Manubles, tuvo durante el medievo un gran valor táctico; su castillo fue imprescindible para controlar el paso hacia la meseta soriana.

La  iglesia de San Millán es uno de los escasos ejemplos del románico que excepcionalmente se conservan en esta Comarca. También podemos visitar el puente, construido en la misma época, así como la antigua Casa Consistorial, una pequeña joya del renacimiento aragonés.

Iglesia de San Millán

La  iglesia románica de San Millán en Berdejo es uno de los escasos ejemplos del románico que excepcionalmente se conservan en la Comarca de Calatayud. De su fábrica original apenas queda la cabecera y el presbiterio, pudiéndose datar a caballo de los siglos XII y XIII. Una reforma realizada en el siglo XVII adaptó el edificio al gusto barroco y cambió su planta y fisiomia interior.

El ábside, uno de los pocos de la comarca construido en piedra de sillería, presenta cuatro semicolumnas adosadas en su perímetro, dividiéndolo en cinco paños. Éstas aparecen rematadas con  sencillos capiteles que junto a los canecillos de perfil liso, contribuyen a sustentar la cornisa. Los restos de un ventanal, en la actualidad cegado, se adivinan en el paño central. 

El interior es de una sola nave, compuesta por cuatro tramos divididos por tres arcos fajones apuntados. En los laterales se abren dos capillas en el siglo XVIII; una de ellas, la de la Virgen del Río, prácticamente se encuentra colgada sobre el Valle del Manubles.

Antigua Casa Consistorial

Entre los edificios reseñables de la localidad destaca la antigua Casa Consistorial, una pequeña joya del renacimiento aragonés recientemente restaurada. Levantada en 1598, es una de las más singulares de la Comarca de Calatayud. En su interior se ha ubicado la biblioteca municipal y un pequeño pero interesante museo dedicado a la escuela del lugar, en cuya pizarra pueden leerse unos versos que nos hablan de los últimos niños que se sentaron en esos pupitres.

Castillo de berdejo

 El castillo de Berdejo tuvo gran valor estratégico debido a su situación fronteriza  con Castilla. El castillo está situado sobre un promontorio rocoso que domina la población. Está formado por un recinto alargado de planta trapezoidal, de unos 30 por 20 metros. Tres de sus muros nacen del borde del acantilado y se refuerzan por torreones rectangulares. El cuarto muro es la torre del castillo, cuadrada, de mampostería, reforzada por sillares en las esquinas, de unos 7 metros de lado por 12 de altura. En la torre se encuentra la puerta de ingreso, en arco de medio punto y adornada con moldura exterior, defendida por un foso excavado en la roca. El acceso es en recodo cubierto por bóveda bajo la torre. Sobre la puerta presenta dos plantas iluminadas por ventanas. En el centro del patio se sitúa un aljibe cubierto por bóveda. A un nivel inferior se observan algunos restos de las murallas.